"Ya me quejé yo, que no me quejo casi nunca. Fue una injusticia, pero ya ha pasado. La queja formal (a la UEFA) hemos decidido no hacerla. No ganamos nada", ha confesado el técnico del Barça cerrando el capítulo de lo sucedido ante el Inter de Milán. 

Así que ahora, a mirar hacia delante. Y lo primero que tienen enfrente, antes de El Clásico del próximo fin de semana y de la finalísima, de nuevo contra el Inter en el Camp Nou, es el Celta de Vigo. De rotaciones, eso sí, sólo las imprescindibles. "Sacaremos el mejor once mirando las fatigas, las molestias, los partidos seguidos. Pero queremos seguir siendo líderes. Ya habrá tiempo para hablar de la Champions". 

Lo que sí podría haber es modificaciones de posiciones, como ver a Frenkie de Jong (25) actuando de central. "Ya lo hemos probado, es potente y rápido. Hay otras alternativas también. Veremos qué decidimos, pero técnicamente es difícil verle perder una pelota, puede jugar de central, en la derecha, en la izquierda... ", ha desvelado. 

Recuperar al mejor Dembélé

También Xavi ha mostrado confianza en recuperar la mejor versión de Dembélé (25). "Está en el buen camino, le hemos dado confianza y cariño. Ha marcado diferencias en muchos partidos, tiene potencial para hacerlo, pero se lo tiene que creer más, debe marcar más diferencias, nos tiene que ayudar más". 

Del mismo modo, considera que hay que reducir la dependencia que se tiene de Lewandowski (34) en los goles. "Todos deben aportar, hemos de mejorar la capacidad goleadora de los de arriba, mejorar las faltas, tirar desde fuera, centrar mejor y decidir mejor en zona de tres cuartos". 

En ese sentido, Xavi pide más a hombres como Raphinha (25) o Ferran Torres (22). "No es fácil atacar contra equipos que se cierran, hay que buscar soluciones. Raphinha está muy bien, más cómodo en banda. Ferran está al cien por cien, entrena bien, va a jugar, es un ejemplo".