"La Asociación Mundial de Atletismo toma nota de la sentencia de la Sala profundamente dividida del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH). Seguimos siendo de la opinión de que el reglamento DSD es un medio necesario, razonable y proporcionado para proteger la competencia leal en la categoría femenina, tal y como el Tribunal de Arbitraje Deportivo y el Tribunal Federal Suizo consideraron, tras una evaluación detallada y experta de las pruebas", ha indicado el organismo internacional como reacción al fallo de Derechos Humanos.
Por consiguiente, no va a cambiar de momento su normativa para que Semenya, campeona olímpica en 2012 y 2016, pueda competir en su prueba de 800 a no ser que se someta a un tratamiento para reducir sus altos niveles de testosterona.
Lo que sí hará World Athletics, porque "el caso se presentó contra el Estado suizo y contra la Asociación Mundial de Atletismo", a raíz del fallo judicial es ponerse en contacto con el gobierno de Suiza y solicitar "la remisión del caso a la Gran Sala del TEDH para una decisión final y definitiva. Mientras tanto, se mantendrá el reglamento actual de la DSD, aprobado por el Consejo Mundial de Atletismo en marzo de 2023".
En función de esto se tomará la determinación sobre si se cambia el reglamento que impide a atletas hiperandrogénicas competir en pruebas que van desde los 400 metros a la milla.