Tom Brady siempre ha demostrado que le cuesta mucho alejarse del fútbol americano. En 2022 anunció que se retiraba y terminó volviendo con los Buccaneers. Con solo un año de diferencia parece que puede estar repitiendo la operación.
Así lo dejó caer el reputado ‘insider’ de la NFL, Rich Eisen, en su podcast: “Esto me dejó alucinado. Tom Brady podría no haber terminado después de todo”, dijo. “Hay que mantener un ojo en Miami”, agregó. Los Dolphins serían los mejor colocados, ya que la familia del ‘GOAT’ vive en Florida.
Eisen, que estuvo presente en el Combine de la NFL durante toda la semana pasada, dijo haber escuchado en el evento esta información procedente de un par de personas. Sin duda, en la liga estarían encantados con dicho regreso, ya que temen que la marcha del ’12’ haga bajar súbitamente el interés por la competición.
Además del gusanillo del ovoide, parece que a Brady le han interesado mucho los contratos firmados por Geno Smith (32) -renovación por tres años y 105 millones de dólares con los Seahawks- y Derek Carr (31) -fichaje por cuatro campañas a 37,5 millones por curso y 100 garantizados con los Saints- recientemente.
El ex de Patriots y Buccaneers terminó la última campaña sin que la edad afectase a sus estadísticas. Pese a sus 45 primaveras exhibió un nivel fantástico y, por condiciones, podría haber seguido jugando tranquilamente. Seguramente por este motivo ha decidido reflexionar sobre una posible vuelta que podría reportarle una buena suma económica.
¿Qué pasaría con Tua?
Más allá de la gran noticia que sería la vuelta del ‘GOAT’ para los aficionados al fútbol americano, hay que analizar si los Dolphins estarían dispuestos a incluir esta pieza en su proyecto. Después de muchos años negativos, en el curso 2022 han logrado construir un equipo competitivo que pinta muy bien de cara al futuro.
Cuentan con buenos corredores, una defensa que les ha hecho ganar partidos y un quarterback muy prometedor como es Tua Tagovailoa (25). Hacerse con Brady supondría relegar al Hawaiano al banquillo para apostarlo todo a una temporada, en lugar de pensar a medio-largo plazo. Una decisión complicada que tendrá que tomar la gerencia de la franquicia de Miami si finalmente los rumores son ciertos.