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Tom Brady, el mito de la NFL

AFP - César Suárez
Tom Brady, el mito de la NFL
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El mítico Tom Brady, quien anunció el miércoles a los 45 años su retiro definitivo  del deporte, fue el mejor jugador de la historia de la liga de football americano (NFL) y se cansó de marcar récords.

Mariscal de campo, desafió las leyes del tiempo de uno de los deportes físicamente más peligrosos y se marcha como su mayor coleccionista de récords y títulos, con siete conquistas del Super Bowl de diez disputados.

"Iré al grano de inmediato: Me retiro, para siempre", dijo el astro de los Tampa Bay Buccaneers en un vídeo publicado en sus cuentas de Twitter e Instagram.

"Sé que todo el proceso fue enorme la última vez. Esta vez, cuando me he levantado esta mañana, he pensado en pulsar el botón de grabar y contároslo a vosotros primero", continuó.

El legendario 'quarterback' ya se había retirado hace un año, cuando perdió el Super Bowl con los Tampa Bay Buccaneers y se quedó con las ganas de obtener su octavo título. Sin embargo, cambió su decisión y volvió por una última temporada, la de 2022, en la que fue eliminado en la serie divisional de la Conferencia Nacional por los Dallas Cowboys.

El mayor robo del draft 

Nacido el 3 de agosto de 1977 en San Mateo (California), el ascenso de Tom Brady hasta el panteón del deporte estadounidense era casi imposible de vaticinar cuando aterrizó en la NFL en 2000 como un absoluto desconocido.

A diferencia de quienes serían después sus grandes rivales, como los hermanos Peyton y Eli Manning, nadie esperaba en el Draft a Brady y fue subestimado al punto que seis mariscales de campo fueron escogidos antes que él.

Acabó seleccionado en el lejano puesto 199 por los New England Patriots del técnico Bill Belichick, también recién llegado a la franquicia.

Llegó en silencio

En aquel momento, la mayor expectativa del desgarbado joven era ser el suplente de Drew Bledsoe, una de las primeras figuras de la NFL en recibir un contrato de más de 100 millones de dólares.

Poco a poco, Belichick fue recibiendo señales de que tenía en sus manos a un jugador especial, con una ética de trabajo y espíritu competitivo que se convertirían en sus señas de identidad.

Su gran oportunidad llegó en septiembre de 2001 cuando una lesión de Bledsoe le permitió convertirse en titular y comandar sorprendentemente a los Patriots al triunfo en la Super Bowl.

Esa victoria marcó el inicio de un reinado de dos décadas en el que Brady y Patriots se convirtieron en la fuerza dominante de la NFL, con ocho viajes más al Super Bowl, cinco de ellos saldados con victoria.

La dinastía tuvo también sus decepciones y controversias. En 2007 los Patriots se quedaron a las puertas de ser el segundo equipo en completar una temporada perfecta al caer en la final ante los New York Giants.

En 2015 estalló el escándalo conocido como 'Deflategate', en el que los Patriots fueron acusados de manipular la presión de los balones utilizados en la final de conferencia contra los Indianapolis Colts.

Brady, que recibió después una sanción de cuatro partidos, pudo jugar y ganar aquel Super Bowl.

También fue objeto de críticas por su relación con el expresidente Donald Trump, si bien Brady declinó apoyarle públicamente en las elecciones de 2020. "La política y la amistad son dos cosas muy diferentes", argumentó.

Gigante

En la temporada 2016-2017 firmó su obra maestra en la NFL guiando a los Patriots a levantar una desventaja de 28-3 en la Super Bowl ante los Falcons, la mayor remontada de la historia de la final.

"Cuando el partido está en juego, él saca su mejor football", en palabras del ex mariscal de campo Kurt Warner.

Su última victoria con los Patriots se produjo en 2019 ante Los Angeles Rams. Un año después sorprendió a la NFL al anunciar su mudanza a Tampa (Florida) para jugar con los Buccaneers, una franquicia que no clasificaba a los playoffs desde 2007.

Incluso con las limitaciones que imponía la pandemia de Covid-19, Brady convirtió a los modestos 'Bucs' en una franquicia ganadora.

Su séptimo título de Super Bowl en 2021, con 43 años, lo catapultó al panteón de los más grandes del deporte estadounidense, junto a mitos como Michael Jordan, Babe Ruth o Tiger Woods.

¿Su secreto para mejorar con la edad? Un conocimiento profundo de su deporte -"cuanto más estudio, más miro, más entiendo"-, un estilo de vida estricto (sin alcohol, carne, azúcar, gluten, lácteos...) y su amor por el juego, a pesar de las más de 150 lesiones acumuladas en 23 temporadas.

En su deslumbrante palmarés sobresalen numerosos récords de la NFL, como sus 89.214 yardas de pase, 9.000 más que el segundo de la lista, Drew Brees, o sus cinco trofeos como MVP (mejor jugador) del Super Bowl.

Fuera de los terrenos de juego, también era conocido por ser el marido de la supermodelo brasileña Gisele Bündchen, de la que se divorció el pasado octubre tras 13 años de matrimonio.