Kim Ye-ji, que causó sensación en redes sociales por su estilo único y seguridad demostrado en la competeción, se desplomó repentinamente el viernes mientras hablaba con periodistas. Tras su desmayo fue ingresada en un hospital de Jeonju (sur) para someterse a pruebas.
Su entrenador, Kwak Min-su, dijo que Kim no tenía problemas de salud, pero a su vez reconoció que había estado lidiando con "fatiga acumulada" tras completar una agenda apretada desde julio.
Durante las pruebas olímpicas, Ye-ji se mostró muy tranquila, con unas gafas de tiro futuristas y una gorra de béisbol colocada al revés, lo que le hizo ganar notoriedad y seguidores en redes.
La que era una de las favoritas para la medalla de oro en la prueba de pistola de 25 metros fue incapaz de superar la clasificación al no disparar en el tiempo previsto. Tras su fallo, pidió disculpas a sus seguidores por su "gran error".