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Rybakina se separa de su entrenador a escasos días de que arranque el US Open

La favorita del US Open despide a su entrenador a pocos días del US Open.
La favorita del US Open despide a su entrenador a pocos días del US Open.Profimedia/Wally Nell/ZUMAPress
La tenista kazaja, una de las favoritas para ganar el torneo norteamericano, ha despedido a Stefano Vukov.

Elena Rybakina y Stefano Vukov comenzaron a trabajar en 2019 y juntos lograron formar rápidamente una asociación exitosa. La actual cuarta del mundo ganó su primer título de Grand Slam en Wimbledon hace dos años, antes de llegar a la final del Abierto de Australia del año pasado, donde fue derrotada por Aryna Sabalenka.

En Instagram, Rybakina confirmó que ha puesto fin a su relación con Vukov y le agradeció sus años de servicio.

"Hola a todos, después de cinco años, Stefano y yo ya no trabajamos juntos", escribió. "Le agradezco su trabajo en la pista y le deseo lo mejor para el futuro. Gracias a todos por vuestro apoyo", agregó.

Este tándem fue cuestionado en ocasiones y las críticas alcanzaron su punto álgido durante el Abierto de Australia del año pasado, cuando la leyenda Pam Shriver instó a la jugadora de 25 años a buscar otro entrenador que la tratara con "respeto".

Shriver dijo entonces: "Mientras veo a Rybakina intentar ganar su segundo grande en siete meses, espero que encuentre un entrenador que le hable y la trate con respeto en todo momento y que nunca acepte menos".

Elena se apresuró a defender a Vukov en respuesta a los mensajes de Pam, instando a cualquiera que no tenga información privilegiada a que evite hablar de cosas de las que no tiene conocimiento.

"A diferencia de la gente que hace estos comentarios, él tiene un gran conocimiento de mí como jugadora y atleta", afirmó. "Nunca aceptaría a un entrenador que no me respetara. Por favor, hagan caso omiso de cualquier noticia falsa que diga lo contrario", apostilló la contrastada tenista.

Elena no ha tenido la mejor preparación para el último Grand Slam del año. A principios de verano se vio obligada a retirarse de los Juegos Olímpicos y del Abierto de Canadá debido a una bronquitis.