Un condenado por violencia racista jugará el Mundial de rugby en Francia
El jugador de 31 años fue convocado por el seleccionador Fabien Galthié el viernes, como reemplazo del lesionado Paul Willemse, compañero suyo en el Montpellier.
El tribunal correccional de Toulouse había condenado a Chalureau a seis meses de prisión, con el cumplimiento de la pena en suspenso, por "actos violentos con la circunstancia de que esos últimos fueron cometidos por la raza o etnia de la víctima".
Los hechos se remontan a finales de enero de 2020, cuando pertenecía al Stade Toulousain, su club de formación. Fue acusado entonces por dos exjugadores de rugby de haberles agredido, incluyendo un puñetazo en la mandíbula, en un parking después de haber proferido insultos racistas.
El internacional galo niega haber utilizado términos racistas y dice haber recurrido, según la prensa. Contactado por la AFP este domingo, su abogado no estaba localizable.
El capitán de la selección francesa de rugby, Antoine Dupont, fue preguntado sobre esta controversia el domingo y aseguró que "no afecta" al equipo y que "siempre tuvo una actitud ejemplar, dentro y fuera del terreno de juego".
El seleccionador rechazó dedicar tiempo a la cuestión, a la vez que reafirmó que "el racismo no tiene su lugar en el equipo".
La ministra francesa de Deportes, Amélie Oudéa-Castera, estimó este domingo en un comunicado que "a la espera de la decisión judicial definitiva, hay que dejar a la justicia realizar de manera serena su trabajo, respetando la presunción de inocencia".
A su vez, subrayó que "ser elegido por una selección de Francia supone representar los valores republicanos de igualdad y fraternidad, así como comportarse en consecuencia y, sobre todo, combatir toda forma de violencia y discriminación".