Rodrygo, un tímido reconvertido en atrevido para beneficio del Real Madrid
La ausencia de Karim Benzema (35) por lesión en semifinales del Mundial de Clubes y las pocas opciones ofensivas que tiene el técnico Carlo Ancelotti en su plantilla obligaron a Rodrygo a vestirse de 9 el miércoles en Rabat. Y dio un recital.
Inteligencia, calidad y oportunismo eran las cualidades naturales del futbolista de 22 años. En los últimos tiempos se le ha unido el descaro que siempre le ha sobrado a su inseparable Vinicius, su compañero de generación, selección y delantera en el gigante blanco.
Con estos atributos, Rodrygo puede jugar en cualquier posición del ataque, un comodín de lujo para Ancelotti, que en la final del sábado ante el Al Hilal ya contará con Benzema, por lo que Rodrygo podría partir desde la banda o como segundo punta.
'Nunca dejes de intentarlo'
Contra el Al Ahly, el jugador formado en el Santos robó un balón, tiró un regate de fútbol sala y enfiló al arquero Mohamed Elshenawy, al que le salvó el poste tras la genial picadita del atacante.
"Estuve a punto de meter un golazo en la primera parte. Después de eso seguí intentándolo en la segunda hasta que ocurrió", dijo a la FIFA tras el duelo.
El Real Madrid ganaba por 2-1 y el Al Ahly peleaba por seguir en el partido. El duelo ya estaba en la prolongación cuando Dani Ceballos (26) y Rodrygo se devolvieron el balón de tacón y el brasileño volvió a enfrentar al arquero internacional egipcio. Esta vez no falló.
"Creo que ese es el secreto: nunca dejes de intentarlo hasta que pase. Me alegré por haber conseguido fabricar esa jugada con Ceballos y haber logrado marcar", añadió.
Tras debutar en el Real Madrid en 2019 con solo 18 años, Rodrygo mostró siempre un idilio con la Liga de Campeones, donde su gran hito fueron los dos goles que marcó en la prolongación de la vuelta de semifinales ante el Manchester City que significaron el pase a la final de la pasada edición.
El menudo mediapunta tenía instinto asesino, pero había recibido críticas por su falta de atrevimiento, algo que ha corregido esta temporada.
Ninguna jugada ilustra mejor su cambio que el gol que metió el 26 de enero contra el Atlético en Copa del Rey, que dio pie a la remontada de su equipo (3-1). Recibió en carrera, recortó a tres jugadores y fusiló a Jan Oblak con un inesperado remate con el exterior al primer palo.
Apostó por el Al Hilal
El internacional con Brasil, que disputó cinco partidos en el pasado Mundial, se concentra ya en la final ante el Al Hilal, vigente campeón de Asia, que en semifinales se impuso 3-2 al Flamengo.
A diferencia de la opinión general, Rodrygo cree que en Tánger se cumplieron los pronósticos, a pesar de que el Flamengo, campeón de la Libertadores, es quizás el equipo de Sudamérica con más estrellas (Pedro, Everton Ribeiro, Giorgian de Arrascaeta, David Luiz, Arturo Vidal...).
"Sabíamos que era el favorito contra el Flamengo. Muchos de los jugadores estuvimos prediciendo que ganaría Al Hilal y lo hizo. Jugó realmente bien", señaló.
"Será un rival complicado, pero estamos aquí para proclamarnos campeones, ahora tenemos que trabajar duro para levantar este trofeo", añadió.
Con cuatro meses por delante, Rodrygo alcanzó en Rabat los diez goles en una temporada por primera vez en su carrera. Casi sin hacer ruido, el 21 del Real Madrid se ha vuelto indispensable.