Mahomes y Allen se reencuentran en un cara a cara que marcará una época
Esta vez, ambos conjuntos se miden con el objetivo de conseguir una victoria que les coloque con el mejor récord de toda la AFC. Los dos llegan con un balance favorable de 4-1 y desplegando un juego brillante. Pero amigos, en aquella eliminatoria se jugaban algo mucho más grande, pasar a la Final de Conferencia y poder pelear por un billete para la Super Bowl. La batalla fue encarnizada y quedará en el recuerdo de todos los aficionados. "El mejor partido de Playoff de la historia de la NFL", sentencia la CBS en su 'promo' del encuentro del domingo.
Más allá del espectáculo que brindaron en toda la cita, quedan en nuestra retina los dos últimos minutos de la contienda. En ese escaso lapso de tiempo, hubo dos cambios de ventaja y, cuando Buffalo ya acariciaba el triunfo, un 'Field Goal' de Kansas City condujo la resolución a la prórroga (36-36), en la que Patrick Mahomes conectó perfectamente con Travis Kelce (33) para anotar el touchdown que cerraba la velada.
Un final de infarto precedido de 60 minutos en los que los jugadores pusieron toda la carne en el asador. Gabriel Davis (23), receptor del cuadro neoyorquino, fue el que más brilló, sin ninguna duda. La mitad de sus ocho recepciones fueron anotaciones y cerró la noche con una tarjeta de 201 yardas. Un desempeño monstruoso que se quedó sin premio. Tyreek Hill (28), aquél día en los Chiefs y ahora en los Miami Dolphins, tampoco se quedó atrás al aportar 150 yardas y un touchdown.
Pero vamos a los mariscales. Los dos firmaron unos porcentajes soberbios en el pase y lanzaron más de 300 yardas cada uno. Sin embargo, el dato más curioso es que ambos tiraron de personalidad para ser los hombres con más distancia recorrida por tierra en sus respectivos equipos. Mientras que el número '15' de Kansas se fue a 69 yardas y un touchdown, su homólogo alcanzó las 68. Una muestra clara de la versatilidad de dos futuros integrantes del Salón de la Fama.
Hubo de todo aquella noche del 23 de enero de 2022 y es por ello que ahora el reencuentro se está vendiendo por todo lo alto. Pese a llevarse el gato al agua, en la Final de la AFC los Chiefs no pudieron superar a Joe Burrow (25) y sus Cincinnati Bengals, que cayeron derrotados en la Super Bowl a manos de unos poderosos Los Angeles Rams.
Dos quarterbacks de élite
¿Por qué es el partido que todo el mundo quiere ver? Pues porque se enfrentan, con permiso del MVP Aaron Rodgers y de Tom Brady, los dos mejores directores de juego de la liga. Los dos se encuentran en lo más alto de las tablas estadísticas y lo que aportan en facetas intangibles como el liderazgo, la serenidad o la calidad está muy por encima de lo que pueden llegar a dar el resto.
Durante las primeras cinco semanas de competición, Josh Allen ha sido el quarterback que más yardas de pase ha sumado a su casillero con 1.651. Tiene un cañón en el brazo. Lo ha hecho con nada menos que el 66,8% de efectividad y solo ha sido interceptado en cuatro ocasiones.
Por su parte, Mahomes ha demostrado ser algo más fiable a la hora de conservar el balón y solo ha tenido dos intercepciones en cinco partidos. También es el primero de la NFL 2022/23 en número de touchdowns con 15. Para repartirlos, ha acumulado 1398 yardas con un 66,7% de eficiencia.
El otro gran duelo de la noche
Equipos como estos, aspirantes al anillo, no solo viven de sus quarterbacks. Durante el partido conviene seguir muy de cerca a Stefon Diggs (28), tercer receptor con más yardas de la liga -508 y cinco touchdowns-, en el lado neoyorquino. En el bando contrario, el hombre de confianza es el 'tight end' Travis Kelce, autor de 347 yardas y siete touchdowns en este arranque de campeonato.
Las espadas están en todo lo alto y el 'hype' por las nubes. Queda muy poco para disfrutar de uno de los mejores partidos de la Liga Regular. Si todo va como se espera, disfrutaremos de un gran espectáculo y podría repetirse en Playoffs. Soñar es gratis.
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