Es un derbi y siempre hay más revoluciones que en otras ocasiones, sobre todo después de estar más de un mes sin poder disfrutar de LaLiga, pero Barcelona y Espanyol han vivido una previa muy acalorada, quizá demasiado si tenemos en cuenta precedentes anteriores. Andrés Iniesta, por su recuerdo a Dani Jarque en la final del Mundial de 2010, sigue siendo la gran excepción al recibir los aplausos de la grada perica.
Lo cierto es que este partido de ida se celebra en el Spotify Camp Nou y no todos los aficionados que acudan al estadio lo podrán vivir de la misma manera. Según ha denunciado el equipo blanquiazul a través de su cuenta oficial de Twitter, habrá seguidores que no podrán ir con los colores de su equipo, una situación que ha generado malestar.
Más sorprendente es la claridad con la cual el Espanyol ha anunciado que los aficionados del Barça, en un contexto similar pero de cara a mayo, tampoco podrán ir vestidos de azulgrana cuando les toque visitar el RCDE Stadium. "Como consecuencia, actuaremos de forma recíproca en el partido de vuelta", explicó el club en un mensaje que ronda el millón de visualizaciones.
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"Ante la injusticia y el agravio que en nuestra valoración representa la decisión del Tribunal Central Contencioso de Madrid a 24 horas de un encuentro y, teniendo en cuenta el peligroso precedente para la equidad de la competición que representa esta vía y esta decisión, el club ha decidido no tener representación institucional del RCD Espanyol en el partido de liga a disputar mañana en el Spotify Camp Nou", anunció la entidad con mucha rotundidad.
El comunicado continúa de la siguiente forma: "Entendemos que más allá de la resolución y del caso concreto, se sienta un precedente absolutamente nocivo para LaLiga en su conjunto y para todos los clubes que formamos parte. En ese sentido, se están valorando por parte de los servicios jurídicos del club todos los aspectos legales a nuestro alcance para defender los intereses de la entidad y de sus aficionados".