La 103ª edición del Campeonato de España sigue adelante. Tras un viernes apasionante, con un récord de Marta Serrano y una espectacular carrera de 5.000 metros lisos que conquistó Ouassim Oumaiz, llegaba una nueva sesión en la que había otras dos finales más: la de 10.000m y la de lanzamiento de disco -ambas en categoría femenina-. Las dos grandes favoritas cumplieron con los pronósticos.
María Pérez no tuvo ninguna oposición: despuntó desde el principio y siempre estuvo en solitario. Llegó al ecuador de la carrera en 22:20.80 (a 4:28 por kilómetro) y fue de más a menos, es decir, la segunda mitad por debajo de la primera en cuanto a velocidad. Cruzó la línea de meta en 45:02.15 y eso le valió para sumar su tercer metal en pista -tras los de 2019 y 2021-.
La plusmarquista nacional Raquel González hubiese sido una gran aspirante al oro de no haber tenido que ausentarse debido a un inoportuno virus. La gallega Antía Chamosa (45:39.65) se colgó la plata y Lidia Sánchez-Puebla se hizo con el bronce (46:01.92). El cuarto puesto, con opciones de haber alcanzado alguna de esas prestigiosas posiciones, fue para Cristina Montesinos (46:17.29).
Kintana, líder desde el principio
La navarra empezó con un gran lanzamiento (51.63) que aumentó hasta en dos ocasiones (53.88 la mejor marca). Ninguna otra atleta se acercó y, por tanto, la emoción se centró en la lucha por la plata: Andrea Alarcón (50.43) y Daniela Fernández (50.06), esta última de sólo 17 años, centraron la disputa. La jovencísima catalana, con una larga trayectoria por delante, se tuvo que conformar con el tercer puesto.