Watt, que tiene prácticamente asegurado un puesto en el Salón de la Fama, está considerado uno de los mejores defensas de la historia y estaba a punto de convertirse en agente libre al expirar su contrato con los Arizona Cardinals en 2023.
Pero Watt, quien anteriormente jugó para los Houston Texans, dijo que la derrota en tiempo extra 19-16 del domingo ante los Tampa Bay Buccaneers sería su último partido en casa.
"Mi último partido en casa de la NFL", dijo Watt, de 33 años, quien añadió que era el primer partido al que asistía su hijo Koa. "Mi corazón está lleno de amor y gratitud. Ha sido un honor absoluto y un placer".
Al defensive end, que fue seleccionado cinco veces para la Pro Bowl, le quedan dos partidos con los Cardinals como visitantes contra los Atlanta Falcons y los San Francisco 49ers, en medio de una decepcionante temporada de 4-11.