Aunque no hubo protestas, un desafortunado espectador fue golpeado por el golpe de salida de Rahm en el hoyo 12. La pelota le golpeó en la cabeza antes de rebotar en un búnker.
Rahm, campeón del Masters, quedó en una posición imposible y tuvo que jugar su bola al revés para salir de la trampa, pero no antes de ir a ver cómo se encontraba el aficionado.
El español, que es acompañado por cánticos de Rambo durante sus rondas en el Open, pasó varios minutos hablando con el aturdido, quien estaba plenamente consciente, y le ofreció un guante firmado antes de continuar su ronda.
Los médicos asistieron al espectador mientras Rahm hacía un bogey en su primera ronda.
Los manifestantes de Just Stop Oil han amenazado con atacar el torneo en el campo de Royal Liverpool, como ya han hecho en otros acontecimientos deportivos de alto nivel, incluido Wimbledon, donde esparcieron piezas de rompecabezas y cinta adhesiva en una pista.
Se ha aconsejado a los jugadores que no se tomen la justicia por su mano si los manifestantes irrumpen en el campo, aunque Rahm dijo antes del torneo que no había leído el memorándum.
"Tengo una reputación, así que espero que no me pillen en un mal hoyo", bromeó Rahm esta semana.
"Puede que tengan más espacio para correr y hacer lo que necesiten, pero lo que puedo asegurar es que no quieres que te golpee una pelota de golf. Ya sea a propósito o incluso por accidente, no quieres verte atrapado en medio de eso".
Pues no fue a cosa hecha, pero las palabras de Jon Rahm se hicieron realidad para desgracia de un pacífico espectador.