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La Final Four de la Liga de Naciones femenina se disputará en Cádiz y Sevilla

Daniel Núñez
España buscará el título continental.
España buscará el título continental.AFP
El Nuevo Mirandilla acogerá las 'semis' y La Cartuja será sede tanto del duelo por el tercer puesto como del que decidirá a la gran triunfadora.

La Real Federación Española de Fútbol ha confirmado este martes dónde se celebrará la Final Four de la Liga de Naciones: Cádiz y Sevilla. Así, la comunidad del sur vuelve a recibir al cuadro comandado por Montse Tomé. Ya pugnaron ante Suiza en el Nuevo Arcángel (Córdoba) y cerraron la fase de grupos en La Rosaleda (Málaga). Entre un encuentro y otro, de forma casi excepcional, se desplazaron a tierras gallegas para jugar frente a Italia en Pasarón (Pontevedra).

El antiguo Carranza es el escenario del choque entre la Roja y Países Bajos, que se jugará el viernes 23 de febrero a partir de las 21h00 CET. Una victoria serviría para conseguir el billete a los Juegos Olímpicos de París, si bien habría una nueva oportunidad en caso de derrota. Está por ver si el público de la Tacita de Plata podrá disfrutar de Alexia Putellas, quien se someterá a una artroscopia con el objetivo de conocer el motivo de las molestias que sufre en la rodilla de la lesión.

Las campeonas del mundo, que llegarán a la cita en el puesto más alto en el ranking de la FIFA tras la última actualización, se enfrentarán a Alemania o Francia el miércoles 28 de febrero, fecha en la cual se llevarán a cabo el partido decisivo y la lucha por el bronce. Pase lo que pase, especialmente en caso de pugnar por el título, debería haber un gran ambiente en las gradas porque es festivo (Día de Andalucía).

Pese a las dudas generadas ante la Azzurra y durante la primera mitad del envite frente a Suecia, es evidente que parten como claras favoritas para tocar el cielo de la capital hispalense. Sólo hay que mirar a lo ocurrido en Australia y Nueva Zelanda, ya que las otras tres selecciones cayeron en cuartos o incluso antes -las germanas protagonizaron una auténtica debacle y ni siquiera alcanzaron los octavos, el mínimo exigible-.