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Papel y lápiz: ojeadores buscan a las estrellas del futuro en el Mundial Sub-20

AFP
Italia está en los cuartos de final
Italia está en los cuartos de finalLUIS ROBAYO / AFP
En una de las tribunas del estadio Diego Armando Maradona de La Plata, un pequeño escuadrón de hombres toman notas mientras tienen un ojo puesto en el partido. Enviados por clubes de todo el mundo, ansían descubrir a las perlas del fútbol en el campeonato que se celebra en Argentina.

Algunos dibujan a mano el croquis de la cancha y forman los dorsales de los 22 futbolistas. Otros corren a buscar en aplicaciones web el historial de los adolescentes que inspiran aplausos de los fanáticos.

Principalmente enviados por clubes de Europa y Estados Unidos, los emisarios pasan casi desapercibidos en el Mundial Sub-20 que se juega en Argentina. La competencia es feroz y silenciosa para cumplir un mismo objetivo: ser el cazatalentos que descubra al futuro Lionel Messi o Cristiano Ronaldo.

"No sé si jugará para mi club" pero del torneo saldrá una "estrella, seguro", dice a la AFP Enzo Portillo, un ojeador del Colorado Rapids estadounidense presente en el Brasil-Túnez de octavos de final.

Romper el mercado

Portillo, de 40 años, se frota las manos. Ante sus ojos puede estar la próxima gran contratación de la MLS, la liga de Estados Unidos que cambió su paradigma de contrataciones desde su creación, en 1993, hasta hoy.

Antes hacía millonarios contratos a figuras al borde del retiro. En la actualidad prefiere romper el mercado llevándose a los jóvenes más prometedores del resto del continente.

Portillo confiesa su interés por el argentino Valentín Carboni, del Inter de Milán, y por el brasileño Marcos Leonardo, del Santos.

"Sería muy importante para la liga contratar a un jugador joven, una de las figuras del Mundial Sub-20 (...) Vamos más por los jugadores de características diferentes al resto, jugadores distintos", dice.

El Mundial Sub-20, en el foco
El Mundial Sub-20, en el focoANDRES LARROVERE / AFP

Junto a él, ojeadores del Manchester City, del Atlético de Madrid, del Torino de Italia y otros varios clubes hacen sus propios análisis, aunque en su mayoría prefieren guardar silencio ante los medios. Otros aún más misteriosos hacen anotaciones en el papel en mandarín.

Portillo explica las razones del hermetismo: "Uno no quiere que (otro cazatalentos) sepa con qué jugador estás trabajando para poder llevarlo".

El Mundial Sub-20 ya fue cuna de fenómenos como Maradona, Messi, Xavi, Ronaldinho o Haaland. "Es la edad justa, el momento para llevarlos", complementa Portillo, un ojeador experimentado tras sus pasos por divisiones inferiores de Argentinos Juniors, Lanús y Boca Juniors, tres de las canteras más reputadas de Argentina.

Un nuevo ídolo

Tras bambalinas el Mundial Sub-20 esconde una contienda entre clubes. El dinero y el palmarés serán claves para convencer a los jóvenes futbolistas cuando está a punto de iniciar el frenético periodo de fichajes de verano en Europa.

El Milán depositó su confianza en el argentino Manuel Madonni. Su misión es "mirar todos" los 52 partidos y "hacer un análisis de todos los chicos de hay para que el día de mañana" los más prometedores puedan hacer parte del 'rossoneri'.

Sin expresar emociones y haciendo pocas anotaciones en su celular, Madonni sigue de cerca a la Brasil de Ramon Menezes y otras selecciones sudamericanas, las favoritas de los cazatalentos.

"Milán creció en una etapa con jugadores brasileños como Kaká, Ronaldinho, Dida o Cafú. Estoy buscando esos perfiles para el fútbol italiano y para nuestro club", asegura.

De Brasil, el centrocampista Marlon Gomes (Vasco Da Gama) llena su retina y sobre Colombia expresa su especial interés por el "potencial increíble" del atacante Yaser Asprilla, del Watford, y Gustavo Puerta, del Bayer Leverkusen.

Asprilla, una de las grandes sensaciones
Asprilla, una de las grandes sensacionesLUIS ROBAYO / AFP

Madonni está convencido del talento innato de los sudamericanos: juegan en terrenos difíciles y "todavía tienen una ventaja grande sobre Europa", asegura.

La tecnología también está al servicio de los sabuesos del fútbol juvenil. Un joven de 24 años que no revela su identidad por orden del conjunto inglés para el que trabaja convierte en datos todos los movimientos de los jugadores del campeonato.

Como su club oscila entre la primera y la segunda división de Inglaterra, le apunta a hallar una perla oculta en Argentina: "Los buenos ya son conocidos y se pide mucho dinero por ellos (...) Nosotros miramos jugadores muy físicos, en la liga necesitamos jugadores fuertes, atléticos, y en el Mundial se está viendo todo el nivel", concluye.