Hay cosas que el dinero no puede comprar. Ni siquiera siendo el estado más rico del mundo, como Arabia Saudí. Se quedaron con las ganas de tener a Leo Messi y ahora parece que se van a quedar sin poder ser los anfitriones de la Copa del Mundo de dentro de siete años.
Según ha desvelado el diario Marca, los responsables de la candidatura han comprobado en las últimas semanas cómo la candidatura ibérica, a la que luego se sumó Marruecos, tiene una gran ventaja en cuanto a votos se refiere.
De ahí que el ministro de Exteriores saudí, Faisan bin Farhan Al Saud, haya contactado con los responsables de Grecia y Egipto, que iban en su candidatura, para explicarles la decisión de retirarse.
La FIFA aún no ha dicho nada al respecto, pero en caso de confirmarse el adiós de los saudíes, España, Portugal y Marruecos sólo tendrían como rivales a la candidatura sudamericana formada por Argentina, Uruguay, Chile y Paraguay.