Publicidad
Publicidad
Publicidad
Más
Publicidad
Publicidad

Jackson, la última perla del Villarreal por la que el Bournemouth se tira de los pelos

César Suárez
Jackson, la última perla del Villarreal por la que el Bournemouth se tira de los pelos
Jackson, la última perla del Villarreal por la que el Bournemouth se tira de los pelosAFP
Nicolas Jackson (22) es la sensación del Villarreal. Sus dos goles ante el Cádiz fueron clave para un triunfo que aún les deja opciones de disputar la Champions la próxima temporada. Es, sin duda, el futbolista de moda en La Cerámica, pero pocos recuerdan que en enero estuvo vendido al Bournemouth.

Ocho goles en los seis últimos partidos, con tres dobletes, muestran a las claras cuál es el jugador más en forma no sólo del Villarreal sino de LaLiga. Con esta racha, más los tres tantos que acumulaba un jugador que comenzó la temporada en el filial, Nicolas Jackson ya suma 11 y ha superado a los goleadores contrastados que le antecedieron en el cargo. 

Danjuma y Ekambi, los máximos realizadores en pasadas temporadas en LaLiga, se quedaron en 10 cada uno. Le queda al senegalés uno para igualar a Bakambu, que firmó 12 en la campaña 15/16. Unas cifras que elevarán su caché, ya de por sí alto incluso más por sus condiciones y potencial que por sus números. 

Las estadísticas en LaLiga de Jackson
Las estadísticas en LaLiga de JacksonFlashscore

Porque en enero se había acordado su traspaso al Bournemouth por unos 15 millones de euros más variables que podrían haber llegado a alcanzar los 20. Sin embargo, unos problemas detectados en el reconocimiento médico, una lesión muscular, hicieron que el conjunto inglés se echara atrás. No quisieron arriesgarse. Mirando su plantilla, su mejor delantero, Solanke, lleva seis tantos en Premier en 32 apariciones. Su máximo artillero ha sido Billing, un medio, con siete en 35 partidos. 

Visto ahora fue lo mejor que le pudo pasar a Setién y al Villarreal. Jackson volvió de Inglaterra con la decepción en el rostro, pero se recuperó de ese percance, aprovechó la ausencia de Gerard Moreno -también por lesión- y comenzó a marcar goles como churros hasta el punto de hacerse insustituible.