Este campeonato será, con toda probabilidad, la última oportunidad de Gareth Southgate para ganar un trofeo en el banquillo de Inglaterra. Ha sido el propio seleccionador, una semana antes del debut ante Serbia, quien ha admitido que su futuro al frente de los Tres Leones dependerá del resultado del torneo en Alemania.

Si la selección inglesa no mejora su segundo puesto de hace tres años, se marchará a pesar de que la Asociación Inglesa de Fútbol (FA) desea que prolongue su actual contrato, que expira en diciembre, al menos hasta el Mundial de 2026 en Estados Unidos, Canadá y México.

Una eventualidad que el seleccionador sólo se planteará en caso de triunfo en Alemania porque, de lo contrario, explicó Southgate, "la presión sobre sus hombros se haría demasiado pesada".

La elección

"Si no ganamos, probablemente ya no estaré aquí", declaró Southgate al diario alemán Bild. "Así que quizá ésta sea mi última oportunidad. Creo que la mitad de los seleccionadores se marchan después de un torneo, así es el fútbol internacional", añadió.

"Llevo aquí casi ocho años y hemos estado cerca. No puedes ponerte constantemente delante del público y decir: 'Un poco más, por favor'. En algún momento la gente pierde la confianza. Si queremos ser un gran equipo y yo quiero ser un gran entrenador, tienes que conseguir resultados en los grandes momentos".

Southgate lleva ocho años al frente de Inglaterra, durante los cuales la llevó a las semifinales del Mundial de Rusia 2018 y a la final de la Eurocopa 2020, antes de la eliminación en cuartos de final ante Francia en el Mundial de Catar hace 18 meses. En las últimas semanas, los rumores sobre una oferta del Manchester United para convencerle de que dirija a los Diablos Rojos a partir de la próxima temporada se han hecho cada vez más insistentes.