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Opinión: De la Fuente se merece el reconocimiento de todos

Opinión: De la Fuente se merece el reconocimiento de todos
Opinión: De la Fuente se merece el reconocimiento de todosProfimedia
Puede que sea muy fácil después de esta Eurocopa poner en valor el trabajo de Luis de la Fuente, pero no se nos puede escapar que recibió críticas completamente exageradas por un mal partido en Escocia, que supuso una derrota totalmente insignificante para el devenir de la clasificación.

El grupo que ha creado en el vestuario el técnico riojano ha sido uno de los secretos del éxito, además de, por supuesto, unos futbolistas descomunales.

El de Haro ha completado la necesaria evolución del estilo de juego de la selección, que ha pasado de un anquilosado tiki-taka a una combinación de las anteriores esencias, con una verticalidad efectiva y la recuperación de los extremos.

Nadie conoce las categorías inferiores de España como De la Fuente. Su trabajo y sus resultados están ahí: un campeonato de Europa sub 19, un campeonato de Europa sub 21 y una plata olímpica.

Es cierto que el salto es grande cuando llegas a la absoluta y que si no llegan los resultados la paciencia brilla por su ausencia como sucedió con Iñaki Sáez. Pero con la excepción del petardazo de Glasgow, no ha habido motivos, al menos futbolísticos, para cuestionar el proyecto.

De hecho, Luis de la Cuarta ya nos había dado un título como la Nations League (el primero en 11 años) que aunque esté lejos de tener el valor de un Mundial o una Eurocopa, no puede ser minusvalorado. Sobre todo después de haber perdido una final contra Francia en la edición anterior, con el gol en fuera de juego de Mbappé, y de conquistarlo derrotando en semifinales a Italia (campeona de Europa en aquel momento) y en la final a Croacia (tercera del último Mundial).

Sus apuestas

Es cierto que la Federación tendría que haber hecho más por retener a Brahim, que quizás Isco tendría que haber sido llamado antes de su lesión viendo la temporada que estaba haciendo en el Betis (aunque todo hace indicar que de no haber mediado esa fractura diafasaria en el pie izquierdo habría ido a la Eurocopa) y que hay decisiones que son opinables, ya que somos 48 millones de seleccionadores y cada uno tenemos nuestra lista particular.

Pero a nadie se le puede escapar que Luis ha acertado plenamente con el grupo. Especialmente, recuperando a Fabián, un jugador que había desaparecido de las convocatorias de la selección tras la pasada Eurocopa y que atraviesa el mejor momento de su carrera, aunque no tuviera el foco mediático encima en el Betis o en el Nápoles y ahora tampoco lo tenga en exceso en el PSG. Pero también con Dani Olmo, al que le sucede algo similar, al haber militado en el Dinamo Zagreb y en el Leipzig.

Suya fue la apuesta por Nico Williams y por Lamine Yamal en los extremos. Y suyos son otros secundarios como Mikel Merino sin el que quién sabe si habríamos superado los cuartos de final.

Y, contra todo pronóstico, ha hecho titular indiscutible a Marc Cucurella, un jugador descomunal pese a que se hable más de su pelo que de sus cualidades futbolísticas.

El nombre de Luis de la Fuente está ya escrito con letras de oro en los libros de historia del fútbol español junto a José Villalonga, Luis Aragonés y Vicente del Bosque. No sabemos lo que nos deparará el futuro, pero ha devuelto a un país la ilusión y el orgullo por su selección. No olvidemos que en esta Eurocopa hemos derrotado a cuatro campeones del Mundo: Italia, Alemania, Francia e Inglaterra. Disfrutemos de ello.

David Olivares, Senior Editor Flashscore
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