Sobre las 22:30 (horario peninsular español, una hora menos en Escocia), la expedición española, con los 25 futbolistas convocados a la cabeza, llegó al Aeropuerto Internacional de Glasgow tras tres horas de vuelo desde Málaga, ciudad donde Luis de la Fuente y sus pupilos pusieron la primera piedra para clasificarse para la Eurocopa de Alemania de 2024 al imponerse por 3-0 a Noruega.
El mismo resultado cosechó el combinado británico ante Chipre, por lo que el partido decidirá qué país cerrará este parón de selecciones como líder del grupo A (España, debido a su participación en la Final Four de la Nations League, no volverá a jugar hasta el 8 de septiembre en Georgia).
Este duelo hispanoescocés no ha sido de los más habituales a lo largo de la historia (ha habido nueve enfrentamientos previos), pero sí les trae buenos recuerdos a los seguidores españoles, ya que en ese mismo estadio Hampden Park, una selección de Vicente del Bosque que venía de ganar el Mundial de Sudáfrica unos meses antes se impuso en el último partido entre estos dos países.
Corría el año 2010, en concreto el 12 de octubre, cuando la Roja, inmersa en la fase de clasificación para la Eurocopa de 2012 (que también acabó ganando) se impuso en un trabajado encuentro por 2-3. Parecía que iba a ser mucho más sencillo cuando David Villa, de penalti justo antes del descanso, y Andrés Iniesta, a los 10 minutos de la reanudación, pusieron el 0-2 en el marcador.
Pero la alegría de los campeones del mundo no duró demasiado, puesto que en cuestión de otros 10 minutos, Escocia logró el empate gracias a los goles de Steven Naismith y de Gerard Piqué en propia puerta. No fue hasta la crucial entrada en el terreno de juego de Fernando Llorente, que anotó el 2-3 definitivo casi nada más saltar al campo, cuando la selección de Del Bosque se llevó los tres puntos en una fase de clasificación en la que España acabó como primera de grupo con pleno de puntos (24 de 24) por delante de República Checa, la propia Escocia, Lituania y Liechtenstein.
Máxima igualdad a lo largo de la historia
El de 2010 fue el último de los cinco choques entre Escocia y España en Hampden Park, con una igualdad máxima que podría decantarse a favor de uno de los dos países este martes cuando eche el balón a rodar. De esos cinco partidos, los españoles ganaron dos (ese 2-3 en 2010 y un 1-2 en 1974), empataron uno (0-0 en 1965) y perdieron otros dos (3-1 en 1984 y 4-2 en 1957).