Como hace una semana en La Bombonera, Boca y Racing volvieron a pactar un 0-0, esta vez en el Cilindro de Avellaneda, donde el libreto de un juego áspero, de pocas ideas en el centro del campo y contadas situaciones de gol fue el denominador en los 90 minutos.
La igualdad desembocó en la definición desde los once metros, una especialidad de los xeneizes, que ya venían de eliminar por la misma vía al Nacional uruguayo, mientras que Racing volvió a quedarse fuera de las semifinales, instancia que pisó por última vez en 1997.
Exequiel Zeballos, Lucas Janson, Edinson Cavani y Marcos Rojo anotaron para un equipo infalible, mientras que 'Chiquito' Romero tapó los tiros de Gonzalo Piovi y Leonardo Sigali, y el colombiano Juanfer Quintero fue el único de la Academia que convirtió.
Un duelo de altura
Con la victoria, Boca volverá a encontrarse en etapas cruciales con Palmeiras, en otro clásico entre argentinos y brasileños, en el que los paulistas llegan como favoritos, aunque los xeneizes aspiran a hacer valer su oficio copero para salir adelante y llegar una vez más a la final, en busca de la anhelada séptima corona.
Para el Verdão, el partido de vuelta ante el colombiano Deportivo Pereira fue apenas un trámite, porque el 4-0 que le endosó en la ida dejó servida la cuarta clasificación consecutiva a semifinales del alviverde.
El empate sin goles en Sao Paulo no empaña su paso avasallador, con nueve partidos coperos seguidos sin perder (siete victorias, dos igualdades), hacia el sueño de bordear su cuarta Libertadores, tras las alzadas en 1999, 2020 y 2021.
El jueves, en Asunción, se conocerá el rival del Internacional de Porto Alegre en las semifinales cuando choquen el Olimpia de Paraguay, monarca en 1979, 1990 y 2002, y Fluminense, uno de los clubes grandes de Río de Janeiro y de Brasil, que no ha levantado el trofeo de la Libertadores.
El Fluzão de Marcelo, Felipe Melo y el argentino Germán Cano va arriba en la serie por 2-0.