Publicidad
Publicidad
Publicidad
Más
Publicidad
Publicidad

Un 'fideo olímpico' y un taconazo de Cabral meten al Benfica en la Europa Liga (1-3)

André Guerra
Di María celebra su gol olímpico ante el Salzburgo
Di María celebra su gol olímpico ante el SalzburgoAFP
El Benfica jugará la Europa Liga después de que Arthur Cabral anotara en el tiempo añadido el tanto que mantenía con vida al conjunto portugués, que necesitaba ganar por dos o más goles de diferencia al Red Bull Salzburgo. En la primera mitad, Di María y Rafa ya dejaban bien encarrilada la clasificación, pero Susic lo complicó todo tras el descanso hasta que llegó el héroe inesperado para sellar el 1-3 definitivo.

La tarea no parecía fácil, pues los austriacos sólo habían perdido por dos goles una vez esta temporada, contra la Real Sociedad, y llegaban a este partido sin conocer la derrota en sus cinco últimos enfrentamientos. A su favor, también, estaba el hecho de que nunca habían perdido en Austria.

Hacía falta una noche especial... y apareció Di Magia

Los cambios introducidos por el técnico benfiquista en la retaguardia dificultó a los rojos la salida del balón ante un Salzburgo que se sentía cómodo en la posesión y se tomaba su tiempo para atacar. A pesar de las dificultades para hacerse con el control de la fase ofensiva, el Benfica tuvo la primera ocasión clara de gol, con Rafa plantándose solo delante de Schlager, pero disparando por encima del travesaño... Los fantasmas del empate con el Farense asomaban.

Sin embargo, fue la tónica que necesitaban las Águilas para asentar el juego en campo contrario con confianza y fluidez. Di María empezó a abrir el libro de la sabiduría futbolística: dentro del área, se quitó a dos defensas y sacó un disparo cruzado que pasó a milímetros de la cabeza de Tengstedt y del poste de Schlager, que estaba ya batido. Al minuto siguiente, en el 33, hizo magia. En un saque de esquina, el movimiento de Otamendi engañó a los defensas y al portero, que se vio sorprendido por el gol olímpico del extremo argentino.

Los anfitriones reaccionaron. En el minuto 40, Ratkov ganó un rechace, pero se topó con un seguro Trubin que, poco después, volvió a intervenir en un disparo de Nené que podría haber sido más altruista.

Justo antes del descanso, la lluvia dio paso a un baño de hielo en las gradas austriacas cuando los rojos marcaron su segundo gol. Tengstedt se interpuso en el camino, João Neves se recuperó y pasó a Di María, con el argentino habilitando inmediatamente a Rafa en profundidad, que disparó un centro raso para meter provisionalmente al Benfica en la Europa Liga.

Los fantasmas de Faro...

Con la clasificación en la mano, Schmidt regresó de los vestuarios en busca del tercer gol y de sentenciar la eliminatoria con la entrada de Musa por Tengstedt. El delantero croata dispuso de una primera ocasión, pero erró.

Rafa lo hizo aún peor a un metro del portero. En una recuperación al borde del área contraria, João Mário ganó el balón en la banda y centró, pero el delantero portugués, completamente solo, disparó al muñeco.

Para colmo de males lusos, cinco minutos después marcó el Salzburgo. Al final de una jugada paciente y bien diseñada, Oscar Gloukh dejó el balón a Susic en la frontal del área y el potente disparo del delantero croata se desvió en Tomás Araújo, sin que Trubin pudiera defenderse.

Rafa, en el centro de los derroches

Como en la liga, el Benfica sólo podía quejarse de sí mismo por no tener puntería. Incluso tras el gol de Susic, las ocasiones se sucedían, pero entre el punto de mira ligeramente desviado de la zurda de Di María y, especialmente, de la derecha de Rafa, no había forma de anotar el tercero.

El argentino siguió sacando conejos de la chistera, ya fuera disparando o sirviendo, e incluso remató al poste con un disparo que dejó a Schlager clavado en el césped. El portugués, por su parte, apareció en el corazón del área para rematar por encima un centro de Morato y luego hizo todo lo posible por aislarse ante el portero, que respondió con una gran parada. ¡Fueron nueve las oportunidades que desperdició Rafa para marcar!

¡Hasta el final!

Musa también se sumó a la fiesta, pero no acertó con un rebote fortuito. João Neves también lo intentó desde lejos. Los minutos pasaban, pero fuese quien fuese el implicado, el destino parecía ser el mismo. Hasta que Arthur Cabral entró en juego en los últimos cinco minutos.

El patito feo, que costó más de 20 millones de euros, apareció en el momento justo, en el lugar adecuado, para desviar de tacón un pase de Aursnes, que siguió a un excelente saque de banda de João Neves. Y ahí el Benfica, esta vez sí, pudo sonreír sabiéndose de nuevo en Europa. 

 

Jugador del partido Flashscore: Ángel Di María (Benfica).

Todos los detalles del Salzburgo-Benfica, en Flashscore.