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El Mónaco eclipsa al Estrella Roja con una gran segunda parte (5-1)

François Miguel Boudet
Breel Embolo fue esencial para el éxito del Mónaco
Breel Embolo fue esencial para el éxito del MónacoValery Hache / AFP
El Mónaco, que no pasó del empate hasta el tiempo añadido de la primera parte, dio un paso adelante en el segundo periodo para doblegar a un Estrella Roja de Belgrado que se fue quedando inevitablemente rezagado con el paso de los minutos (5-1). Los locales mantienen su imbatibilidad y se colocan provisionalmente en la cabeza de la clasificación de la Liga de Campeones.

Con 4 puntos en la clasificación, el AS Mónaco tenía la oportunidad de acercarse al top ocho, que le clasificaría directamente para los octavos de final de la Liga de Campeones, con una victoria en casa ante el Estrella Roja. Y lo consiguió, tras una segunda parte casi perfecta (5-1).

El Mónaco empieza fuerte pero deja de jugar

Los rojiblancos estuvieron a punto de abrir el marcador en su primera incursión en el partido. Un centro de Vanderson desde la derecha fue rematado por Breel Embolo, en fuera de juego, que dejó escapar el balón por encima de su cabeza para sorprender a Young-Woo Seol, pero Eliesse Ben Seghir tenía demasiado a su merced y erró el disparo.

Tras un primer disparo de Bruno Duarte que se marchó fuera, los serbios crearon peligro en un saque de esquina, pero Peter Olayinka cabeceó directamente a las manos de Radoslaw Majecki Dalcio tuvo que intervenir para rechazar un centro de Silas.

El congoleño es mejor delantero que defensor: en su propio campo, no se alineó y Takumi Minamino, asistido en carrera por Wilfried Singo, se encontró absolutamente solo en el centro gracias al trabajo de Embolo para sortear a dos adversarios y pudo ajustar ante Marko Ilic. 

Todo iba bien para los locales. Las ruedas de prensa previas a los partidos no siempre son cosa de palabras elocuentes, pero Adi Hütter mencionó el lunes a Andrija Maksimovic, de 17 años. Y tenía razón. El centrocampista se zafó de la presión en el centro y envió un balón largo a Chérif Ndiaye. Por delante de él, Singo permitió al delantero correr hacia la portería, donde se quedó mirando y luego enganchó el balón para batir a Thilo Kherer, culpable de una entrada de cadete que le costó un penalti. El senegalés se hizo cargo de la pena máxima y la transformó.

Embolo recupera su instinto

El Mónaco estaba a remolque y le costaba mucho acercarse a la portería de Ilic. Cuando el tiempo pasaba y solo quedaba un minuto de descuento, Embolo, tras un saque de banda interceptado por Ben Seghir, recogió el balón con aplomo y marcó por fin el primer gol de la temporada. El éxito pudo ser doble si, en el último lanzamiento de falta, Denis Zakaria ve cómo Ilic detuvosu cabezazo y Singo no logró enderezar la trayectoria.

Aleksander Golovin sustituyó a Ben Seghir en el descanso. La consigna era sencilla: aumentar la ventaja y dejar sentenciado el partido. Maghnes Akliouche probó suerte, pero su disparo cruzado fue parado por Ilic. A continuación, el internacional sub-21 asistió a Caio Henrique, pero el guardameta serbio estuvo impecable.

Sin embargo, poco pudo hacer ante el cañonazo de Singo desde el suelo a la escuadra en pocos segundos: desde 30 metros, el defensa aprovechó su oportunidad y marcó el gol de la noche.

El Club du Rocher se encontraba en una posición sólida y siguió presionando.. Embolo, en plena forma, asistió a Lamine Camara, que encontró a Vanderson al borde del área, pero el disparo del brasileño se marchó desviado.

En la segunda parte, Akliouche se empleó a fondo, cabeceando al poste un saque de esquina botado por Camara e intentando una volea con la zurda a pase aéreo de Golovin.

Y al presionar tanto a los defensas del Estrella Roja, el Mónaco añadió un cuarto gol al marcador: Akliouche puso en aprietos a los visitantes, pilló desprevenido a Milan Rodic , que se resbaló, y Embolo sólo tuvo que ofrecer el tanto a Minamino, que marcó por partida doble. A continuación, Golovin intentó igualar el remate de Singo, pero dio en el poste cuando Ilic estaba batido.

Para los serbios, el final del partido fue una pesadilla, con Olayinka y luego Dalcio lesionados. El Estrella Roja, que se quedó con 10 hombres porque ya se habían realizado todos los cambios y Dalcio apretó los dientes a pesar del dolor, consiguió acabar como pudo. Akliouche y Golovin estuvieron a punto de aumentar la cuenta. 

Con el pitido final, y aunque fuera puramente honorífico, el Mónaco se hizo con el liderato en solitario de la clasificación de la Liga de Campeones, con siete puntos. Para el Estrella Roja, en cambio, esta tercera derrota consecutiva pone probablemente fin a sus ambiciones europeas esta temporada.

Jugador Flashscore del partido: Minamino (Mónaco)

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