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Xabi Alonso hace un llamado a la calma antes del partido ante el Bremen

AFP
Xabi Alonso, entrenador del Leverkusen
Xabi Alonso, entrenador del LeverkusenAFP
"No pensar demasiado en lo que pasará después": ese es el consejo que el entrenador del Bayer Leverkusen, el español Xabi Alonso, deseó dar el viernes a sus jugadores, a 90 minutos de lograr un primer título en los 120 años de historia del club.

Todavía invicto tras 42 partidos esta temporada entre todas las competiciones, el Leverkusen recibe al Werder Bremen el domingo (17h30 CET) en el cierre de la 29ª jornada, y en caso de victoria logrará el primer título de la historia del club fundado en 1904 por la empresa química Bayer.

"El equipo está concentrado, implicado. Tengo confianza y si hacemos eso, habrá algo que celebrar. Pero quedan 90 minutos por jugar, para lograr esa victoria", explicó Xabi Alonso durante la tradicional rueda de prensa prepartido.

El español de 42 años ya conoce la sensación de ganar un título nacional como jugador, tras haberlo hecho en España con el Real Madrid y en Alemania con el Bayern Múnich. "No hay que pensar demasiado en lo que pasará después", aconsejó el técnico vasco a sus jugadores.

"Por suerte, no es nuestra única 'bola de partido'. Pero evidentemente queremos ganar el domingo. Celebrar un título en casa con los aficionados sería bonito", añadió.

Técnicamente, el Bayer Leverkusen podría ser campeón desde el sábado delante de la televisión, en caso de derrotas en sus estadios del Bayern Múnich, que recibe al Colonia (13h30 GMT) y del Stuttgart, anfitrión del Fráncfort (16h30 GMT), posibilidad que Alonso no cree que vaya a darse.

"Creo que eso sería una gran sorpresa", deslizó con un gesto dubitativo en el rostro. "Para ser honesto, preferiría ganar el título sobre el terreno con nuestra victoria".

Siempre sonriente, respondió en su lengua natal a los periodistas españoles desplazados a Leverkusen para la ocasión, haciendo él mismo la traducción al alemán de sus respuestas.

Rechazando imaginarse en posibles celebraciones en caso de lograr el título, sí dijo estar "listo" para recibir la tradicional ducha de cerveza con la que los jugadores proclamados campeones de Alemania bañan a sus entrenadores tras el pitido final.