James Rodríguez, seguro entre la Kings League y la capitanía de Colombia
Muchas son las estrellas que brillan en un Mundial y después se apagan. Pocos representan tan bien ese fenómeno como un James Rodríguez (32) que maravilló al planeta con su fútbol de otro tiempo en Brasil 2014 y en apenas una década ha tirado por el desagüe un abanico interminable de posibilidades.
Su posición de mediapunta a la vieja usanza no le ayudó a encajar bien en las mejores plantillas del planeta, pero fueron todos los escándalos y problemas extradeportivos los que terminaron convenciendo a sus diferentes entrenadores de que era incapaz de triunfar en los equipos en los que estuvo.
Tal vez, el mayor problema del centrocampista colombiano fue su falta de docilidad. En lugar de agachar la cabeza y pelear cuando la situación lo requería, siempre prefirió protestar y decir en público aquello que se le pasaba por la cabeza. "Cuando juegas más es normal que rindas más", llegó a decir en noviembre de 2017, cuando militaba en el Bayern, en una clara muestra de disconformidad con los minutos que le dio Zinedine Zidane (51) cuando coincidieron en el Real Madrid.
Desde entonces, un regreso a la capital de España, Catar, Grecia y, ahora, Brasil, vistiendo la camiseta del Sao Paulo, en lo que apunta ser el prematuro epílogo de una carrera llena de "¿y si?" que se lamentan por lo que podría haber sido este futbolista de capacidades por encima de la media.
Zona de confort
Si en algún sitio siempre estuvo cómodo James fue en la selección de Colombia. Allí se olvidaba de los problemas en el club y dejaba destellos de su incuestionable calidad. A día de hoy sigue siendo ese bastión que le permite seguir sintiéndose seguro.
Así se lo transmite su seleccionador, Néstor Lorenzo, que cree a ciegas en Rodríguez pese a su falta de minutos en el Sao Paulo: "Es un líder muy talentoso y ha hecho muy buenos partidos en eliminatorias. Siempre aporta algo distinto", indicó en su última rueda de prensa.
Esta noche (21.30 horas), en Londres, el Bota de Oro de Brasil 2014 tiene la oportunidad de lucirse contra España para tratar de ganarse un último billete al fútbol europeo. La cosa está muy difícil, pero la buena dinámica de los cafeteros, con 19 partidos seguidos sin perder, puede ayudarle a cuajar una buena actuación con la que atraer la atención del viejo continente.
Kings League Américas
Aunque todavía es joven y puede buscar relanzar su carrera, James ya piensa en el futuro. En esa línea, el colombiano se ha lanzado a presidir un equipo en la nueva Américas Kings League, la división americana de la competición creada por Gerard Piqué y su séquito hace poco más de un año.
El Atlético Parceros FC es el proyecto que ilusiona ahora al centrocampista. Llegado el momento, podría incluso participar como miembro de pleno derecho en algún partido del club. Por el momento, marchan cuartos en la clasificación, con nueve puntos tras cinco jornadas disputadas.