Recordemos que Jimmy Garoppolo se lesionó jugando con los San Francisco 49ers durante la Semana 13 de la temporada pasada. Desde entonces, lo único que se ha sabido sobre su estado es que sufría una fractura en la base del segundo metatarsiano del pie izquierdo.

Por ello, el mariscal y los Raiders firmaron un contrato en el que reconoce que, de seguir jugando, puede sufrir más lesiones e incluso una "incapacidad permanente". Teniendo eso en cuenta, asume la responsabilidad completa de lo que suceda y renuncia a reclamar tanto a la franquicia como a la NFL.

Las sospechas se iniciaron cuando Las Vegas pospuso la conferencia de prensa de presentación de Jimmy G. Ahora sabemos que lo hicieron porque el de Illinois no fue capaz de superar los exámenes médicos previos al campamento de pretemporada a causa de los problemas que arrastra en el pie desde la pasada campaña.

Con todos los datos en la mano, medios estadounidenses ya han informado de que Garoppolo ha perdido el bonus por firmar de 11,25 millones de dólares y no cobrará ni un centavo de los 22,5 millones que le restan hasta demostrar que está completamente recuperado. De hecho, en el peor de los casos podría ser cortado por los Raiders sin ningún tipo de derecho a réplica.