Entrevista | Santi Yusta: "¿La Familia? Competir, representar al país y estar con amigos"
Al término de un nuevo entrenamiento en The Embassy, la instalación de lujo que gestionan Berni Rodríguez y José Manuel Calderón en la exclusiva zona de El Higuerón, entre Fuengirola y Benalmádena, el alero del Casademont Zaragoza, capitán del equipo con el que ha renovado hasta 2027, nos atiende para contarnos cómo le va en la concentración de 'La Familia'.
¿Cómo está? Imagino que bien acabando la temporada como el mejor anotador nacional, renovando con su club y siendo citado por la selección?
Bien, la verdad que muy bien, obviamente, como ha dicho, acabé muy bien la temporada, con mucha confianza y vengo así aquí, con mucha confianza para intentar dar lo mejor aquí, intentar estar entre los 12 elegidos y a ver qué tal.
Aún faltan siete por incorporarse a una convocatoria que será de 22, de los que sólo quedan 12. ¿Cómo lo lleva?
Es básicamente competir todo lo que se pueda, esforzarte al máximo e intentar hacerte un huequito, como le digo, entre los 12 últimos, que obviamente es muy difícil porque somos muchos, hay mucha calidad, pero bueno, hay que intentar meter ahí el pie.
¿Ha dado alguna pista, Sergio Scariolo de sus planes estos días?
Ojalá, pero no. Obviamente, trabaja con todos como si fuésemos uno más y no hace distinciones, entonces también es bueno eso.
Usted ha jugado en todas las categorías inferiores, siendo uno de los que tenía mejor proyección, pero le ha costado ser importante la élite, consolidarse como está ahora. ¿Por qué?
Sí, ha costado, obviamente, tanto estar aquí en la selección como estar en la ACB consolidado es un reto muy grande, porque al final, tienes que trabajar mucho, dejar cosas atrás y esforzarte lo máximo en este deporte. Entonces, eso, es un poco de constancia, de perseverancia, estar siempre ahí, entrenando, esperando tu oportunidad y cuando la tengas, cogerla.
¿Pero no tiene la opinión de que cuesta más darle esas oportunidades al jugador español, que los entrenadores no confían en el producto nacional a pesar del buen bagaje que traen desde abajo?
Al final también les quito un poco de presión a los entrenadores porque cuando se hace un equipo profesional, tú quieres ganar, entonces, poner a jugar a chavales jóvenes es un poco de presión, puesto que son nuevos, no hay tanta experiencia, la pueden liar, hablando mal... pero sí, están un poco en el limbo de que suben o no suben, juegan o no. Yo, por ejemplo, tengo el caso de Lucas (Langarita), que está también ahí un poco. Siempre le digo que es conseguir la oportunidad, que tarde o temprano va a llegar y ya está.
No sé usted, pero a mí me da cierta envidia ver, por ejemplo, en Serbia o Croacia, que le dan tantas oportunidades a los jóvenes y aún así hay algún equipo como el Partizán o el Estrella Roja que están en la élite. No sé si eso se podrá ver en España a corto plazo.
Yo creo que sí, obviamente, encima con las categorías inferiores que vienen ahora, que están todas ganando oros, platas..., al final, yo creo que por su propia fuerza, va a haber muchos jugadores ahora jóvenes que van a subir y yo creo que eso se va a ir viendo poco a poco.
Volviendo a la selección, cuando renovó con el Zaragoza dijo que "como en casa, en ningún sitio". ¿Esto también es una casa? Siempre se dice aquello de la familia, pero ¿realmente es así?
Sí, por supuesto (justo suena la música a todo volumen en el pabellón, puesta por el improvisado DJ Joel Parra). Bueno, ahora tenemos música, así que ya se lo puedes imaginar, ¿no? Pero sí, obviamente, cuando vienes aquí, al final, nos conocemos todos de siempre, tenemos muy buen rollo todos. Entonces, aparte de competir y estar aquí en la selección representando a tu país, también es estar aquí con muy buen rollo, estar con amigos y pasártelo bien.
Antes creo que era la pocha el juego estrella en los ratos libres. ¿Y ahora?
También. Recién he empezado yo a aprender en esta concentración y de momento voy perdiendo todo. Pero bueno, voy mejorando poco a poco. Todo el mundo quiere jugar conmigo ahora (risas).
¿Y cómo ve este Preolímpico, esté al final o no entre los elegidos?
Es una final prácticamente antes de las Olimpiadas, que ya es decir, pues bueno, es trabajar a saco y al 100% para poder conseguir estar en el Preolímpico, ganarlo y después ir a los Juegos, que es otro reto más difícil aún.
Hay quien dice que la primera parte del Preolímpico, con rivales como Líbano y Angola, que está tirado, pero cualquier se fía. Aún recuerdo la Angola de Barcelona 92.
Es que es eso, al final es prácticamente a un partido, entonces si pierdes uno de los dos es muy complicado que pasemos, son dos finales. Tenemos que ir a full y conseguir pasar. Y luego Finlandia, Polonia, Bahamas. A priori pueden parecer selecciones un poco inferiores, pero es que es lo que le digo, es una final para todos, tenemos que estar al 100% porque en un partido puede pasar cualquier cosa, puedes tener un mal día, malos porcentajes de tiro, y entonces te vas. Por eso hay que estar muy concentrados, da igual qué selección tengamos delante, ir a por todas.
Su polivalencia le permite ocupar varias posiciones. De 3, de 2, incluso de 4.
La verdad es que donde me quiera poner el entrenador me vale, pero estoy acostumbrado a jugar al tres, un poco al dos. El tema de faltas, de los hombres grandes y tal, pues puedo hacer algún minuto, pero bueno, donde estoy más cómodo es en el 3 y en el 2.
Le digo lo del 4 porque el baloncesto actual muchas veces ha tendido a no jugar sin pívot y con muchos exteriores.
Sí, sí, al final me beneficia a mí, consigo más minutos, ¿no? Pero da igual donde esté en la cancha, si alguna vez hay algún problema de faltas con los grandes o queremos jugar un small ball, que se dice, pues estoy ahí al 4, me viene perfecto también para jugar.
Pues hay jugadores de perímetro que rehúsan a meterse en la zona por los palos que se dan ahí abajo.
Sí, sí, normalmente son más anchos que yo, digamos (sonrisa).
Usted estuvo en el Real Madrid, conoce bien a Rudy Fernández, ¿cómo se vivió en la concentración ese homenaje de su afición y cómo lo van a recibir?
Ese homenaje es lo que se merece. Ha ganado muchísimas cosas, ha sido un referente en el baloncesto español. Ojalá que estemos en las Olimpiadas para que él pueda conseguir otra vez jugarlas. Vamos a recibirle como se merece.
¿Y para usted, qué sería jugar esos Juegos Olímpicos?
Sería un sueño, el de cada jugador, ¿no? Sería mi primera competición internacional. Entonces, por partida doble, súper orgulloso estaría, con muchísimas ganas de jugar.
Tiene varios tatuajes, faltaría entonces el de los aros.
Seguro, seguro. En alguna parte cabría.
Santi, pues muchísimas gracias y ojalá tenga suerte en el futuro.
Perfecto, muchas gracias.