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Jordan Díaz, la confirmación de un meteorito

AFP
Jordan Díaz celebra su oro en el estadio de atletismo
Jordan Díaz celebra su oro en el estadio de atletismoAFP
Estuvo tres años en la sombra, voló en Roma en el Europeo y se confirmó en París con el oro olímpico: a sus 23 años, el habanero Jordan Díaz, que compite por España, es la estrella del momento en triple salto.

A la capital francesa llegó "con demasiada presión", como él mismo reconoció con un deje de agobio estos últimos días y molestias en la pierna derecha desde hace medio año.

Pero con un salto de 17,86 metros en su primer intento, en la final este viernes en el Estadio de Francia, Jordan Díaz proclamó que está llamado a hacer grandes cosas en la disciplina.

Y lo hizo delante de un veterano con el que no esconde la rivalidad: el santiaguero Pedro Pablo Pichardo, que defendía el título olímpico y se conformó con darle a Portugal la plata con una marca de 17,.84.

Con su vuelo en París 2024, Jordan Díaz confirmó que lo de Roma, el 11 de junio, no fue una excepción. Entonces saltó 18,18 metros para colgarse el oro en los campeonatos Europeos, en su debut internacional con España.

Sin embargo, las cosas no fueron sencillas antes de llegar aquí para este saltador siempre bienhumorado y apasionado de los videojuegos.

Pedroso y Peleteiro, sus ángeles de la guarda

Jordan Díaz desertó del equipo cubano en junio de 2021, cuando este se dirigía a los Juegos de Tokio. La delegación hizo escala en Madrid para desde allí subir a Noruega a los Bislett Games y más adelante dirigirse a Japón.

Pero Díaz se marchó a Zaragoza, con un familiar que tenía allí. Uno de tantísimos casos, y no precisamente el último, como lo ilustra la estadística oficial: desde 2022 hasta finales del año pasado migraron de Cuba 187 atletas de alto rendimiento.

El joven atleta veinteañero sintió vértigo. Por sus padres, que se quedaron en Cuba y apoyaron no obstante con firmeza su decisión -su madre fue clave en su vocación-, y porque su iniciativa implicaba tres años de sequía en competición antes de regresar con los colores de otro país, como establece el reglamento.

Es decir, perderse los Juegos de Tokio, los Mundiales de Eugene 2022 y Budapest 2023, los Mundiales en pista cubierta, un campeonato europeo...

Fue "una decisión muy complicada" venir a España, recordó tras su triunfo en Roma.

Pronto contactó con la española Ana Peleteiro, que este junio hizo por cierto doblete con él en la capital italiana, al imponerse en el triple salto femenino.

Y de su mano acabó en el lugar idóneo: el equipo de élite de Guadalajara entrenado por Iván Pedroso. Con la propia Peleteiro y con la venezolana Yulimar Rojas, plusmarquista mundial de triple salto y campeona en Tokio.

"Transmite mucha tranquilidad. Es el mejor", dice Jordan como un mantra, cuando habla de la leyenda cubana del salto de longitud.

Díaz obtuvo la nacionalidad española por carta de naturaleza en febrero de 2022, y el 7 de junio de este año fue autorizado a competir por su país de adopción, donde asegura que siempre se sintió bien recibido. No defraudó, con un triunfo cuatro días más tarde en Roma que además fue récord nacional.

En Guadalajara, el habanero comparte techo con el saltador de longitud español Héctor Santos, que es uno de sus mayores admiradores y lo ve batiendo algún día la plusmarca mítica del británico Jonathan Edwards (18,29), que se resiste desde 1995.

"Ha sido un cambio muy grande (para Díaz), pero en el grupo hemos hecho una pequeña familia aquí", contaba Santos al portal especializado Runner's World.

En Guadalajara "vivo muy tranquilo. Si vivo en Madrid no salto 18,18 metros", dijo Díaz bromeando recientemente en el programa televisivo La Resistencia, en una aparición que rubricó su nueva estatura mediática.

Un talento precoz

En su etapa cubana, Jordan Alejandro Díaz Fortún se destacó muy temprano como un gran talento, y de hecho fue admitido con 14 años en la prestigiosa Escuela de Iniciación Deportiva Escolar (EIDE).

A los 16 años se proclamó campeón del mundo sub18 en Nairobi, con un salto de 17,30 metros. Arrasó en aquella competición, ya que ningún otro rival alcanzó los 16 metros.

En 2018 se colgó el oro en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires, y se proclamó campeón del mundo sub20.

Y en 2019, con 18 años, fue medallista de plata en los Juegos Panamericanos de Lima saltando 17,38 metros, y debutó con un octavo puesto en el mundial de atletismo de Doha.